Continuamos con el tutorial para construir nuestro propio estudio de grabación casero. En esta quinta parte daremos un repaso a los monitores (altavoces) y a los auriculares.

Puede que ya tengas por casa altavoces con los que escuches música, o con los que veas películas, no sé, ¿un home cinema quizás? Bien, pues olvídate de eso. Ese tipo de altavoces están genial, pero para lo que están diseñados: Ver películas, jugar a videojuegos, etc. Pero no te van a ser muy útiles para trabajar con audio de una manera profesional o semi-profesional.

Con los auriculares pasa más de lo mismo. Posiblemente ya tengas unos cascos para escuchar música, en tu reproductor mp3, por ejemplo, y seguro que suenan genial, ¿verdad? Pero no te van a a servir para trabajar con audio si te lo tomas en serio.

El principal problema que tienen estos monitores y estos auriculares es que colorean el

Estamos en el primer paso del tutorial para construir nuestro propio estudio de grabación casero. Comenzamos por los cimientos (y nunca mejor dicho) de nuestro proyecto: La ubicación, la localización, el sitio… En resumen, el espacio.

Por espacio nos referimos a la ubicación física donde vamos a montar el estudio. Puede parecer obvio, pero no por ello hay que olvidarse de este paso.

Para empezar a montar el estudio no necesitas mucho, en concreto: cuatro paredes, una mesa y una silla. Simple ¿no? Puede ser el escritorio de tu habitación, una mesa en el salón de tu casa, o un cuarto totalmente reservado para tal labor. Lo más importante a la hora de elegir el espacio es que sea un sitio en el que te sientas cómodo y creativo.

También es importante que el lugar en el que montes el chiringuito sea un sitio tranquilo. Evidentemente, la opción más ideal de todas …